Por Iridiany Martín
La implementación de semáforos en el periférico de Mérida ha generado confusión y caos vial. Estos dispositivos comenzarán a funcionar en unos días, con el objetivo de mejorar el control de los cruces de vehículos y peatones, dado el alto riesgo de accidentes en la zona.
Desde el anillo periférico que va del oriente al norte de Mérida, así como en la salida hacia Cancún, se concentra una gran cantidad de vehículos, motociclistas y autobuses, quienes a menudo deben esperar largos periodos para poder cruzar.
Con la instalación de estos semáforos, que aún no están en funcionamiento, ya comienza la incertidumbre entre los que transitan por la zona.
Durante un recorrido, se pudo verificar que se han instalado un total de ocho semáforos, los cuales comenzarán a funcionar la próxima semana. Todos estarán coordinados en los cruces de la glorieta que conecta con Kanasín.
Si bien, como sucede dentro de la ciudad, el tráfico vehicular en las horas pico, que son entre las 7 de la mañana, el mediodía y las 19 horas, los embotellamientos también hacen presencia en este paso, aunque en un principio fue diseñado justo para el desahogo de este.
Debido al crecimiento de la ciudad y al aumento del parque vehicular en la capital yucateca, el anillo periférico Manuel Berzunza se ha convertido en una de las áreas más peligrosas, con un alto número de accidentes registrados en la zona.
Teniendo estas dos vertientes: tráfico e inseguridad, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) decidió implementar estos semáforos inteligentes para estos puntos estratégicos, pero en algunos puntos donde ya fueron instalados muestran más horas de espera y en algunos hasta un caos.
Entre las modificaciones previstas, los transeúntes que se dirijan de Mérida al periférico deberán esperar para cruzar, al igual que aquellos que salgan de Kanasín. También se verá afectado el tráfico en los laterales, donde dos lados podrán avanzar mientras los otros dos esperarán. Además, se integrarán el IETRAM y el servicio Va y Ven a esta coordinación.
Los semáforos tendrán sensores inteligentes y luces que estarán indicando los cambios, esto para evitar los dos problemas antes mencionados, con el principal enfoque a los embotellamientos que se generan ya que también es paso de camiones de carga pesada y autobuses de viaje.