Valladolid, conocida como “La Perla del Oriente Maya”, es una joya histórica de Yucatán que guarda un curioso dato en su pasado: fue fundada dos veces. Su primera fundación tuvo lugar el 28 de mayo de 1543 en un sitio cercano a la laguna de Chouac-Há, que los colonizadores españoles eligieron por su abundancia de agua. Sin embargo, este lugar resultó poco favorable debido a la resistencia de las comunidades mayas locales.
Por esta razón, en 1545, Valladolid fue trasladada a su ubicación actual, sobre la antigua ciudad maya de Zací. Este segundo asentamiento permitió a los españoles establecer un control más sólido en la región, pero también marcó el inicio de tensiones que culminarían en importantes eventos históricos, como la Guerra de Castas siglos después.
Hoy en día, Valladolid conserva vestigios de esta rica historia. Al caminar por sus calles, puedes admirar su arquitectura colonial, visitar el imponente Convento de San Bernardino de Siena, y explorar la plaza principal, que refleja el legado de ambas culturas, maya y española.
Saber que Valladolid tuvo dos fundaciones no solo enriquece la experiencia de quienes la visitan, sino que también resalta la importancia de este pueblo mágico como un punto clave en la historia de Yucatán.