En Yucatán, el envejecimiento de la población avanza rápidamente, y con ello, emergen retos sociales y de salud que afectan profundamente a los adultos mayores. Según el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), el 14% de los yucatecos son personas de la tercera edad, lo que equivale a aproximadamente 364 mil habitantes mayores de 60 años. Sin embargo, el abandono económico, laboral y emocional afecta a uno de cada cinco, es decir, alrededor de 210 mil adultos mayores, según el Centro de Investigaciones Regionales (CIR) de la UADY.
La presidenta del Colegio de Psicólogos del Estado de Yucatán, Lourdes Valdés Valdez, advirtió que el abandono impacta no solo en el bienestar psicológico de los adultos mayores, sino también en su salud física. Actualmente, el 70% de este grupo etario en la entidad padece depresión, una condición agravada por la falta de interacción familiar, la soledad y la carencia de actividades significativas, aunque en la entidad uno de cada siete personas son adultos mayores, cinco de estos podrían estar sufriendo abandono.
En Yucatán, donde el envejecimiento supera la media nacional del 8%, el aislamiento de los adultos mayores deja cicatrices visibles: ansiedad, demencia, enfermedades cardiovasculares, desnutrición y pérdida de movilidad son algunas de las consecuencias documentadas. Pero el impacto emocional es igual de devastador.
Valdés enfatizó que el abandono no siempre se manifiesta de forma evidente. A veces, basta con la indiferencia hacia las emociones y necesidades de los adultos mayores para desatar una cadena de deterioro físico y psicológico. Los factores que contribuyen a este problema incluyen la falta de visitas, la escasa comunicación y la ausencia de gestos afectivos.