
Con la llegada de las fiestas decembrinas, no solo aumentan las celebraciones, también surgen desafíos emocionales para muchas personas. En Yucatán, al menos dos de cada 25 personas sufren de depresión estacional en este mes, conocida como el trastorno afectivo estacional (TAE), que afecta a niños, jóvenes, adultos y personas mayores de diferentes formas.
La presidenta del Colegio de Psicólogos del Estado de Yucatán, María de Lourdes Valdez Valdés, explica como factores como el clima, las presiones sociales y la falta de luz solar influyen en nuestra salud mental.
La Navidad en la infancia: Entre carencias y sueños rotos
El psicólogo pediatra, Ricardo Macías Mukul, señaló que, para los niños, la temporada navideña puede ser un tiempo de ilusiones o de profundas frustraciones, dependiendo de sus circunstancias. Comentó que mientras los mensajes publicitarios exaltan imágenes de hogares cálidos y llenos de regalos, muchos pequeños en Yucatán viven en hogares donde las carencias económicas dificultan no solo la posibilidad de recibir juguetes, sino incluso de contar con una comida especial en Nochebuena. Para otros, la falta de afecto en sus familias o la presencia de violencia en el hogar convierten estas fechas en un periodo de soledad.
Adolescencia: La presión social y la soledad amplificada
Por su parte, Gerardo Caamal Ruz, psicólogo especializado en jóvenes y coordinador de la licenciatura en psicología, señaló que, la adolescencia es una etapa donde las emociones están a flor de piel, y la Navidad puede intensificar sentimientos de exclusión o soledad. Las redes sociales, aunque parecen una conexión con el mundo, a menudo refuerzan la idea de que otros disfrutan de vidas perfectas, dejando a los adolescentes con una sensación de insuficiencia. Problemas familiares, conflictos con amigos o el estrés académico también se ven exacerbados en este periodo.
Adultez: Estrés financiero y el peso del duelo
La presidente del Colegio de Psicólogos indicó que, para los adultos, especialmente los que son padres, la Navidad puede ser una época de retos emocionales. El estrés financiero por intentar cumplir con las expectativas, el duelo por un ser querido que ya no está o la soledad en el caso de padres solteros son factores que pueden afectar significativamente su salud mental.