
Más de 200 casas abandonadas y en ruinas representan un peligro constante para transeúntes y automovilistas que recorren las calles del Centro Histórico de Mérida. Estas propiedades, muchas de ellas con gran valor arquitectónico, permanecen en futuro incierto debido a la falta de mantenimiento y a las complejidades legales que obstaculizan su rehabilitación.
La directora del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Yucatán, Anna Goycoolea Artis, hizo un llamado a los propietarios de estos inmuebles para que se acerquen a las autoridades y participen en programas de restauración.
La funcionaria subrayó que el objetivo es evitar tragedias y recuperar espacios que forman parte del patrimonio cultural de Mérida.
Destacó que existe un temor injustificado por parte de los dueños, quienes suelen pensar que serán sancionados o regañados por el estado de sus propiedades.
Como parte de las acciones para rescatar las edificaciones, el INAH ha implementado programas como “Acércate al INAH”, una iniciativa que busca brindar asesoría y orientación a los propietarios sobre los trámites y procesos necesarios para la conservación y restauración de sus predios.