
Esta Semana Santa es el momento perfecto para explorar las playas de Yucatán y vivir experiencias inolvidables. Aunque Progreso es el destino más popular por su cercanía a Mérida, el estado esconde otras joyas costeras que te sorprenderán con su belleza y tranquilidad.
El Cuyo. Ubicada al este de Yucatán, El Cuyo es una joya con arenas blancas y aguas cristalinas que te harán sentir en el Caribe. Este destino es perfecto para relajarse, caminar por el pueblo o rentar un carrito de golf para explorar sus murales, el faro y su mirador.
San Crisanto. A solo 77 km de Mérida, San Crisanto es un paraíso poco concurrido donde podrás disfrutar de la tranquilidad. Rodeado de palmeras, este destino ofrece tours por los manglares y un refrescante ojo de agua. Su pequeña plaza central es perfecta para relajarse, especialmente si viajas con niños.
Telchac Puerto. A una hora de Mérida, Telchac Puerto es famoso por sus increíbles spots fotográficos. Este pintoresco pueblo cuenta con un muelle, una playa llena de palmeras y una plaza principal encantadora. Además, está a solo 15 minutos de la zona arqueológica de Xcambó, donde podrás admirar edificaciones mayas bien conservadas. No te pierdas las Salinas Rosas y el cenote Sayá Bak, dos paradas imperdibles.
Sisal. A solo una hora de Mérida, Sisal es un Pueblo Mágico que combina historia y belleza natural. Su playa de arena blanca y aguas tranquilas es perfecta para relajarse bajo una palapa. Recorre su calle principal, visita el muelle y admira los murales en un tour en bicicleta.
Celestún. A menos de dos horas de Mérida, Celestún es un destino mágico famoso por su Reserva de la Biosfera Ría Celestún. Esta playa casi virgen es ideal para caminatas, paseos en lancha y avistamiento de flamencos.