Fuga de talentos tecnológicos en Yucatán preocupa al sector empresarial
Jóvenes son contratados por empresas extranjeras de forma remota, con buenos sueldos, pero sin seguridad laboral ni derrama económica local.

En Yucatán se está gestando un fenómeno que preocupa cada vez más al sector empresarial “la fuga” de talentos tecnológicos, muchos jóvenes altamente capacitados están optando por colaborar con empresas extranjeras desde sus hogares en Mérida y otros municipios del estado, informó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CANIETI) en la región sureste, Raúl Rebolledo Alcocer.
Aunque esta modalidad les ofrece pagos atractivos en dólares o euros, también implica un problema estructural para el estado pues no cuentan con prestaciones, seguridad social ni generan un impacto económico directo en la entidad.
“Los jóvenes no se están yendo físicamente, pero sí mentalmente. Son contratados desde el extranjero, trabajan desde aquí, cobran en cuentas bancarias, pero esos ingresos no se quedan en Yucatán ni aportan al desarrollo local”, explicó Rebolledo Alcocer.
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La CANIETI advierte que esta tendencia limita la capacidad del estado para generar empresas propias en el sector tecnológico, pues el talento que debería impulsar startups y proyectos de innovación en Yucatán termina destinando su esfuerzo a compañías internacionales.
“Lo que buscamos es que esos jóvenes no se vean obligados a buscar fuera, sino que encuentren oportunidades aquí, con empresas yucatecas que confíen en su capacidad”, subrayó el dirigente empresarial.
Recalcó que el fenómeno responde principalmente a un factor económico. Los jóvenes reciben mejores ofertas salariales trabajando por proyectos para compañías extranjeras, sin necesidad de migrar físicamente.
Estas empresas suelen pagar directamente en dólares y, en ocasiones, a través de cuentas internacionales, lo que significa un ingreso atractivo para los trabajadores, pero al margen de la formalidad legal mexicana.
“Es una fuga de talentos porque ese desarrollo no se queda en Yucatán. Aquí tenemos a los jóvenes, pero sus capacidades están siendo aprovechadas por empresas de fuera que no generan un círculo virtuoso en la economía local”, puntualizó Rebolledo Alcocer.
El estado se enfrenta así a una paradoja ya que cuenta con talento joven altamente capacitado, pero carece de suficientes mecanismos para retenerlo.
De mantenerse esta dinámica, Yucatán corre el riesgo de convertirse en un exportador de talento tecnológico sin beneficiarse de su derrama económica y social.







