Ganadería en riesgo: Bajas temperaturas queman pastos y hierbas

Los ganaderos locales han observado una disminución notable de las lluvias en la región desde el inicio de la temporada de nortes. La llegada de los frentes fríos ha traído consigo escasa precipitación, lo que podría anticipar una temporada de sequía. Óscar Cámara, ganadero, destaca la vulnerabilidad de esta zona del Estado durante la temporada seca debido al predominio de un suelo caracterizado por la presencia de laja en los montes, más que tierra.

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Cámara señala que la vegetación en las parcelas se está secando gradualmente, y la escasez de agua está debilitando los potreros. El ingreso de los frentes fríos representa uno de los principales desafíos para los ganaderos, quienes prevén el avance de la sequía con su llegada. Las bajas temperaturas ocasionan la quema de pastos y hierbas, debilitando la alimentación del ganado. “El frío no ayuda. Cuando no hay lluvias para que el monte esté verde, poco a poco se va quemando debido a las bajas temperaturas.”

Hasta ahora, Cámara afirma que los animales pueden alimentarse adecuadamente, tanto en los montes como en los potreros de zacates. Sin embargo, advierte que, en ausencia de lluvias significativas, la situación podría complicarse, especialmente de cara a la temporada de secas del próximo año. “Por el rumbo del puerto es donde se seca más el monte. Ahora cae lluvia, pero no es suficiente; hace falta bastante para que el monte pueda resistir.”

Durante la temporada seca, muchos ganaderos se ven obligados a buscar alimento adicional para sus reses. Dependiendo únicamente de lo que ofrecen las milpas en tiempos de crisis no es ideal para los animales, según Cámara. Con el inicio de los fríos, el ingreso de las vaquillas a los corrales disminuye, ya que se centran principalmente en alimentarse. Aquellos con sistemas de riego son los únicos que pueden proporcionar agua a los campos de zacate, manteniéndolos verdes por más tiempo. Sin embargo, quienes carecen de esta infraestructura están a la expectativa de cómo se desarrollarán las precipitaciones en la región. “No tengo sistema de riego, por eso me preocupan los fríos, adelantan la sequía y queman las plantas.”

Aunque los ganaderos esperan una mayor precipitación, la preocupación persiste, ya que la escasa cantidad de lluvia no es suficiente para humedecer la tierra, sobre todo cuando los nortes no traen chubascos.