
El crimen que conmocionó a Estados Unidos y al mundo
El 20 de agosto de 1989, José Menéndez, ejecutivo musical, y su esposa Kitty fueron asesinados a tiros en su mansión de Beverly Hills. Sus hijos, Lyle y Erik, de 21 y 18 años, reportaron el hecho como un robo, pero inconsistencias en sus versiones llevaron a la policía a investigarlos. En marzo de 1990 fueron arrestados y acusados de homicidio en primer grado.
Durante el primer juicio (1993-1994), el jurado no logró un veredicto unánime. Sin embargo, en 1996 un segundo proceso concluyó con una condena por asesinato en primer grado y la sentencia a cadena perpetua sin libertad condicional.
Juicio, condena y separación
La fiscalía argumentó que los hermanos actuaron por codicia, señalando sus gastos excesivos tras el crimen. La defensa sostuvo que los asesinatos fueron consecuencia de años de abuso sexual y psicológico a manos de José Menéndez.
Tras la condena, los hermanos fueron enviados a diferentes prisiones, permaneciendo separados por 22 años. En 2018 fueron reunidos en la prisión R.J. Donovan en San Diego, momento descrito por testigos como profundamente emotivo.

Pruebas inéditas y renovada atención mediática
El caso recobró fuerza a partir de 2023 con la aparición de nuevos testimonios y documentos. Entre ellos destaca la declaración del exintegrante de Menudo, Roy Rosselló, quien denunció haber sufrido abusos por parte de José Menéndez. También salió a la luz una carta de Erik a una prima en la que relataba agresiones no presentadas en el juicio original.

El estreno de la serie “Monsters: The Lyle and Erik Menendez Story” en Netflix y un documental posterior reavivaron el interés de nuevas audiencias, generando un movimiento en redes sociales en favor de su liberación.
Libertad condicional: avances y tropiezos
En agosto de 2025, tras 36 años de prisión, los hermanos enfrentaron audiencias clave ante la Junta de Libertad Condicional de California.
El jueves 21 de Agosto 2025, Erik Menéndez fue rechazado al no considerarse un “reo modelo”, con antecedentes disciplinarios por posesión de drogas, celular y participación en fraude fiscal. Su hermano Lyle afronta su audiencia el día de hoy viernes, donde se definirá si obtiene o no la posibilidad de libertad condicional.

Un caso aún abierto al debate
Más de tres décadas después, el caso Menéndez sigue siendo un punto de discusión sobre justicia, abuso intrafamiliar y los límites del sistema judicial. Mientras tanto, las nuevas generaciones, influidas por documentales y redes sociales, mantienen viva la pregunta: ¿fueron los hermanos verdugos fríos o víctimas que actuaron bajo un entorno de abuso insoportable?