Sobreviven pese aumento de precios


La comunidad en situación de calle recibe ayuda de instituciones como “El Buen Samaritano” que a una deácada de apertura recibe diariamente a 30 varones adultos completamente desposeídos. A pesar del alza en productos de la canasta básica, el patronato de la institución logra sobreponerse con donaciones de las mujeres integrantes de la mesa directiva y establecimientos comerciales de la zona aun cuando la escalada de precios golpea la economía de los sectores.
Situado al norte de la ciudad en Periférico a la altura del polígono de Chichí Suárez, el refugio destaca por dormitorios, comedor y baños dignos, espacios aseados, ropas desinfectadas así como atmósfera de tranquilidad.
A las seis de la tarde comienza la llegada de personas sin techo, la mayoría alcohólicos y adictos que perdieron todo a causa de los vicios o la imposibilidad de obtener empleo sea por falta de estudios o ya no estar en edad laboral.
Los indigentes llegan por sus medios, algunos son llevados desde el Centro Histórico en una camioneta del Ayuntamiento de Mérida y a las siete de la noche no se recibe a nadie mas. La capacidad es de 30 personas pero han llegado a apersonarse hasta 35.
La regla es no presentarse intoxicado o aliento alcoholico, dejar pertenencias personales en anaqueles afuera de los dormitorios y bañarse. Para ello se disponen regaderas con agua caliente y mudas de ropa limpia. Destaca la higiene de las instalaciones, las camas individuales están en condiciones aceptables y el comedor no resguarda tampoco olores.
Jorge Gerardo “N” es adicto alcohólico en rehablitación. Llegó al refugio tras perder casa, matrimonio y empleo, pero al paso del tiempo quedó como encargado del sitio.
Abogado de profesión, relató que las adicciones arruinaron su matrimonio y la casa que compró en la colonia La Florida se la quedó su ex esposa. La depresión sumado al alcoholismo lo terminaron de hundir hasta que llegó a “El Buen Samaritano” para no dormir más tiempo en las banquetas.
“Cuando me quedé sin casa estuve durmiendo en la combi de un amigo pintor pero al final decidí venir al refugio y aquí encontré la forma de recuperarme de mis vicios. Me gané un sitio como encargado, aquí sigo, pero ahora ayudo a la administración del lugar a mantener el lugar limpio”, describió.
Informó el encargdo que las integrantes del patronato llevan de manera rotativa los alimentos para la cena que sirven a las 07:30 pm y los desayunos a las 05:00 am.
“Después del desayuno a las siete de la mañana yo no puede haber nadie aquí, deben irse a buscar trabajo y a los del centro los lleva de vuelta la camioneta del ayuntamiento. Sí hay planes de abrir otro dormitorio porque ha crecido la indigencia pero está en planes por el momento”, refirió.
Pese a la escala de precios las donantes tratan de no fallarles e incluso hay festines como en el sábado anterior que les llevaron tacos al pastor y una pizzería de cadena comercial les envió seis pizzas grandes.
“A Dios gracias recibimos la comida porque sí hay aumento de indigentes, todo se ha encarecido pero nos mantenemos bien pese a todo. Las señoras del patronato se esmeran por no faltar la comida y ya ve hasta lavandería tenemos para recibir a los muchachos”, comentó.
Fabio Fuentes