La gastronomía de Yucatán no solo destaca por sus exquisitos platillos salados, sino también por su variedad de dulces tradicionales que conquistan a cualquiera con su sabor único. Estos postres, herencia de la cultura maya y la influencia española, son un verdadero deleite para quienes visitan la región. Aquí te presentamos algunos dulces típicos que no puedes dejar de probar.
El mazapán de pepita es uno de los más representativos. Elaborado con semillas de calabaza molidas y azúcar, este dulce tiene una textura suave y un sabor único que refleja la riqueza de los ingredientes locales. Otro imperdible es el dulce de papaya con almíbar, un postre elaborado a fuego lento con papaya verde y especias como canela y clavo, perfecto para quienes disfrutan de sabores dulces y aromáticos.
Si buscas algo diferente, prueba el caballero pobre, una especie de budín elaborado con pan viejo remojado en leche y huevo, que se hornea y se baña en miel o almíbar. Su textura esponjosa y su sabor ligeramente dulce lo convierten en un favorito para las sobremesas. Otro clásico es el dulce de ciricote, hecho con esta peculiar fruta tropical cocida en miel, un manjar poco conocido fuera de Yucatán.
No puedes dejar Yucatán sin llevarte un poco de esta dulzura como recuerdo. Los mercados locales y tiendas de artesanías suelen ofrecer una gran variedad de estos dulces, que no solo son deliciosos, sino también una muestra de la riqueza cultural yucateca. Atrévete a probarlos y llevar contigo un pedacito de la tradición maya.
