Más de 300 estudiantes participan en el Torneo Estatal de Futbol Escolar
Con equipos de siete municipios, el torneo impulsa el desarrollo integral de la niñez yucateca y abre camino al certamen nacional.


Con la energía y pasión que caracteriza al deporte, más de 320 niñas, niños y jóvenes participaron en la primera edición del Torneo Estatal de Futbol Escolar, organizado por la Federación Mexicana de Futbol en coordinación con la Secretaría de Educación del Estado de Yucatán (SEGEY).
La ceremonia de apertura, realizada en el Complejo Deportivo Inalámbrica, reunió a autoridades educativas, representantes de la Federación, entrenadores, madres, padres y familiares, quienes acompañaron a los equipos representantes de Valladolid, Motul, Umán, Tekax, Progreso, Peto y Mérida. El desfile de los participantes marcó el inicio de una jornada de competencia, compañerismo y entusiasmo por el futbol.
En representación del secretario de Educación, Juan Enrique Balam Várguez, el director de Educación Básica, Jaime Enrique Vázquez Barceló, señaló que este tipo de eventos fortalecen valores esenciales como el trabajo en equipo, la disciplina y el respeto, al tiempo que brindan una oportunidad real de desarrollo integral para las y los estudiantes.
Mario Alberto Paredes León, coordinador de Desarrollo Personal y Social, destacó que el torneo no solo promueve habilidades deportivas, sino también la convivencia entre comunidades escolares de distintas regiones del estado, creando redes de apoyo y experiencias memorables.
Tras una intensa jornada de encuentros, la Primaria Ismael García de Progreso se alzó con el primer lugar en ambas ramas. En la categoría femenil, el segundo lugar fue para la Primaria Nachi Cocom de Hunucmá, y el tercer lugar para la Benito Juárez de Progreso. En la rama varonil, el segundo sitio fue para la Primaria José Eusebio Rosado de Progreso y el tercero para la Francisco I. Madero de Peto.
Este evento forma parte del programa Aliados por la Vida, mediante el cual el Gobierno del Estado promueve el deporte como una herramienta de transformación social, generando entornos educativos sanos, inclusivos y motivadores para niñas, niños y jóvenes.