Yucatán, el principal productor de miel en el país
Yucatán se colocó como el principal productor de miel en el país y junto con Campeche, Jalisco y Chiapas generan más de 40 por ciento de la producción en México, de acuerdo con la actualización del Atlas Nacional de las Abejas y Derivados Apícolas del INEGI.
Los datos señalan que en la última década se registró una producción anual promedio de 59 mil toneladas de miel; Yucatán, Campeche, Jalisco y Chiapas generan más de 40 por ciento de la producción apícola del país. Lo anterior posiciona a México entre los 10 primeros lugares en cuanto a la producción mundial de miel.
En el caso de Yucatán, la producción de miel aumentó de manera considerable, siendo el principal productor del país. De 2020 al 2022 pasó de producir cinco mil 529 toneladas por año a nueve mil 220 toneladas.
Le sigue Campeche como uno de los principales productores de miel, que pasó en el mismo lapso de producir cinco mil 375 toneladas a ocho mil 274.
Para el año 2023, la apicultura empleó a 48 mil apicultores, distribuidos principalmente en Yucatán, Campeche y Chiapas. En México, el consumo de miel per cápita anual osciló entre 163 y 280 gramos, en el periodo 2011-2022, de acuerdo con el Panorama Agroalimentario.
Yucatán registra producción de miel en 103 de sus 106 municipios, con la principal producción en municipios como Tizimín, Tekax y Valladolid.
Sin embargo, el documento señala que la apicultura enfrenta problemas socioeconómicos y técnicos, los cuales han tenido considerables consecuencias en la estructura de los costos y, por tanto, en los beneficios económicos.
Los problemas principales son la falta de adopción de tecnologías actuales acordes a las exigencias de inocuidad del mercado; así como las formas de comercialización, principalmente hacia el exterior, donde solo participan exportadores con un esquema de intermediarismo.
Aunado a esto, se encuentra el cambio climático que ha provocado modificaciones en la temperatura, precipitación pluvial, modificación de las estaciones, lo que repercute negativamente en la producción.
