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Piden homologar programas a estándares internacionales

La negativa del gobierno mexicano a participar en la prueba Pisa (Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos de la OCDE) provocará que las empresas extranjeras dejen de invertir en el país por falta de una certificación de la calidad de capacitación de los estudiantes nacionales, señaló el presidente de Asociación Mexicana de Escuelas Particulares en Yucatán, Elías Leonardo Dájer Fader.

Dijo que esta prueba es una certificación internacional, ya que mide la capacidad de los alumnos de 15 años para utilizar sus conocimientos y habilidades de lectura, matemáticas y ciencias para afrontar los retos de la vida real, “hay dos opciones o nos integramos al mundo o nos alejamos de él”, afirmó.

El docente, explicó que si se habla de querer el Nearshoring, de atraer las inversiones, las empresas que llegarían al país van a pedir que las personas que vayan a trabajar en su empresas tengan cierta capacidad de análisis y de poder entender las instrucciones que se den y que puedan tomar decisiones propias, “es un sistema que se maneja a nivel internacional, no es capricho que cada país determina”, aseveró.

Abundó que este sistema internacional de aprendizaje de capacidad de desarrollo y análisis, precisamente se mide con la Prueba Pisa, porque ese ha sido el acuerdo entre naciones de la manera en que una empresa, un país puede saber y comparar, cuál es el avance en términos generalizados, “al decir: nosotros no vamos a participar en la Prueba Pisa, estamos diciendo: rechazamos todas estas capacidades de análisis porque no nos interesan; ese es el mensaje que recibe un posible inversor que se entera de que no estamos en disposición para trabajar dentro de estos esquemas”, agregó.

Dájer Fader, recordó que con la Nueva Escuela Mexicana se habló mucho de la búsqueda de un pensamiento del sur, el cual no existe como tal, “es cierto que tenemos nuestras tradiciones, nuestras creencias, pero igual lo tienen en el resto del mundo”, apuntó.

Detalló que el objetivo debería ser establecer un sistema de pensamiento que permita alcanzar otro nivel de desarrollo; México siempre busca crecer, pero no ha alcanzado un nivel de desarrollo que sea satisfactorio; y la única manera en que se podrá lograr es aumentando la productividad del país.

Se puede repartir dinero con los programas sociales, nadie está en contra de ayudar a quien lo necesite, pero todo eso tiene un límite; se tiene que crecer para ir al mundo entero a conquistar otros mercados, en lugar de encerarnos en una mentalidad endógena, se tiene que aprender a entender a todos los demás del mundo y tener todas las capacidades de análisis para que nuestros hijos puedan ir a otros países hablando su idioma y entendiendo exactamente lo que están haciendo estas personas, “separarse de la Prueba Pisa es negar todo esto, negar este desarrollo y es colocarnos en un muy peligroso proceso de tener serios problemas por no poder financiar todos los compromisos que se están haciendo actualmente”, concluyó.

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