En la próxima temporada de ciclones tropicales para el Atlántico y el Caribe que arranca el 15 de junio, se desplegará en todo el estado una red de dos mil refugios en Mérida y en los municipios del interior del estado, reveló el director de la Unidad Estatal de Protección Civil, Enrique Alcocer Basto.
El funcionario participó en la instalación del Comité para la Atención de Fenómenos Meteorológicos de la UADY, donde recordó que 2024 será un año atípico y que están pronosticados un máximo 23 ciclones tropicales, de los cuales 12 quedarían en la intensidad de tormenta tropical.
En este tema, dojo que antes se creía que eran menos peligrosas las tormentas tropicales, pero no es así, porque se ha visto que traen más agua que los huracanes y fuertes vientos, por lo que no hay que confiarse.
Además, 11 ciclones más alcanzarían categoría de huracán, de los cuales 5 alcanzarían la categoría de muy intensos, es decir, de categoría 03 en adelante. Por ello, llamó a no bajar la guardia y a trabajar de forma coordinada para enfrentar cualquier contingencia.
Expuso que el gobierno estatal trabaja de forma coordinada con las autoridades de los diferentes niveles de gobierno y por medio de Sistema Nacional de Protección Civil que trae nuevos protocolos federales con base en la experiencia de Otis, ajustes en la forma en que se gestiona la emergencia.
De hecho, expuso que el próximo lunes 27 de mayo se estaría instalado el Comité Estatal de Protección Civil, además de que la Comisión de Refugios Temporales ya está trabajando en la revisión de los espacios que servirán para resguardar a la gente en caso de cualquier eventualidad.
“Ya están haciendo las revisiones el Ejército, la Secretaría de Salud, la Secretaría de Educación, Protección Civil, Obras Públicas, para garantizar que los inmuebles estén en buenas condiciones o se hagan las reparaciones necesarias”, expuso.
Dijo que se habilitarán dos mil inmuebles como refugios, de los cuales 40 son administrados por el Gobierno estatal, en las principales zonas de riesgo que es la costa. Los demás, dijo, son administrados por los municipios y, para apoyar esta labor, se cuenta con un fondo de emergencias y desastres que tiene 15 millones de pesos para primera respuesta.
De los sitios que son prioridad para darles atención, dijo que es la costa y el cono sur que es muy propenso a inundaciones.
Además, se tiene convenios diversos para tener transportes y, en caso de ser necesario, se hagan los desalojos.
El funcionario expuso que actualmente también se lleva a cabo la actualización del Atlas de Riesgo que se tendrá listo en junio próximo y que contempla situaciones particulares nuevas, como que suba el promedio de ciclones mínimo anual, además que se suma la experiencia de las inundaciones que se tuvieron en 2020.