Humedad puede provocar el colapso de estructuras como paredes y techos

Las constantes lluvias que han azotado la región en las últimas semanas no solo han causado inundaciones y problemas de movilidad, sino que también representan una seria amenaza para la integridad de diversas estructuras.

Especialistas han advertido que el desgaste continuo de materiales debido a la acumulación de agua puede provocar el colapso de techos y paredes, poniendo en riesgo la seguridad de viviendas y edificios en todo Yucatán.

La preocupación principal de los especialistas se centra en el potencial colapso de techos y paredes, como ha ocurrido en plazas comerciales y tiendas de conveniencia, incluso en construcciones antiguas o mal mantenidas. El arquitecto historiador de ICOMOS de la UNESCO, Raúl Rivero Canto, explicó que la exposición prolongada a la humedad puede debilitar los materiales de construcción, como el concreto y la madera, llevando eventualmente a fallos estructurales.

“La humedad constante es uno de los principales enemigos de las estructuras construidas con materiales porosos o envejecidos. La exposición prolongada al agua puede causar la degradación de materiales como el concreto, la madera y el acero, debilitando la integridad estructural de los edificios”, explicó.

Los techos y las paredes son las partes de las construcciones más vulnerables a los efectos del agua. En muchas edificaciones, especialmente aquellas construidas hace décadas, los materiales ya presentan un grado considerable de desgaste. La combinación de lluvias intensas y la falta de mantenimiento adecuado puede llevar al colapso de estos elementos estructurales.

Señaló que en las últimas semanas, se han reportado varios incidentes de colapsos parciales en estructuras residenciales y comerciales en Mérida y otros municipios de Yucatán. Estos eventos han resaltado la necesidad de una inspección y mantenimiento más riguroso de las edificaciones.

Precisó que ayer también se registró el colapso de una estructura en el Seminario Mayor de Yucatán lo que representa que cada vez más es necesario no solo estar pendientes de los muros, sino también impermeabilizarlos lo antes posible antes de que las lluvias puedan provocar más colapsos en estructuras.

“Especialmente debemos tener precaución de que los tubos por los cuales baje el agua del techo al piso o al subsuelo que conocemos como bajantes porque lo que pasa es que después de los meses de calor y sequía mucha basura o polvo o suciedad obstruyen los bajantes y cuando empieza a llover el agua no fluye por eso, puede ser que si pase, pero no pasa de la manera adecuada”, precisó Rivero Canto.

De esta forma es como las constantes lluvias en Yucatán han puesto de relieve la fragilidad de muchas estructuras ante la humedad y el desgaste. Los especialistas advierten que, sin una acción inmediata y efectiva, el riesgo de colapso estructural seguirá aumentando, poniendo en peligro la vida y el bienestar de los residentes.