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Suspenden evaluación de la MIA de granja en Santa María Chi

La quema de excretas de los cerdos generó diversas enfermedades a niños, adolescente y adultos mayores de la comisaría

El caso de la granja porcícola de Santa María Chi ha tenido un avance, luego de que tras una denuncia ciudadana se suspendió la evaluación del Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA).

Mediante un comunicado la comisaría de Santa María Chi dio a conocer que el pasado lunes, una persona de la comunidad fue notificada por parte de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SDS) sobre la admisión de la denuncia que presentó en contra de la granja porcícola que opera la empresa Chumoxil S.A. de C.V., propiedad de Oswaldo Loret de Mola Coldwell.

La granja, en operación por más de 30 años, con más de 170 hectáreas, se encuentra en una zona protegida en Santa María Chi, y en abril, la quema de excretas de los cerdos generó diversas enfermedades a niños, adolescente y adultos mayores.

En el acuerdo de la admisión, la SDS ordenó girar el memorándum al Departamento de Evaluación Ambiental, para que suspendan la valoración de la MIA de la solicitud MIA-194/2023 hasta que se resuelva la denuncia presentada.

Además, turna la denuncia a los departamentos de Manejo Integral de Residuos y Evaluación Ambiental de la SDS para que programen una visita de inspección, con el objetivo de constatar los hechos.

La suspensión de la evaluación de la MIA fue luego de que el 30 de mayo, la misma SDS publicó en el Diario Oficial del Estado de Yucatán, el proyecto ‘Granja Santa María Chi’, el cual fue puesto a disposición del público, por un plazo de cinco días, para que propusieran medidas de prevención, así como observaciones al manifiesto ambiental que presentó el lugar a fin de que se emitiera el resolutivo a su favor para poder operar sin obstáculos.

Además, el 16 de mayo de 2024, el Juzgado Tercero de Distrito, mediante un juicio de amparo, dio una suspensión definitiva que obliga a la Secretaría de Desarrollo Ambiental y al Departamento de Evaluación Ambiental, a no autorizar la MIA, así como a supervisar e investigar a la granja.

La lucha de los vecinos de Santa María Chi continúa por graves daños ambientales a la comunidad, principalmente debido a que no cuenta la granja con autorización para sus operaciones, las contaminan el manto acuífero de Yucatán.

Por otro lado, los habitantes manifestaron que recolectaron evidencia al detectar salmonela por el agua contaminada.

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