
Como si se tratara de una epidemia que no da tregua, el suicidio mantiene creciente aumento desde hace varios años en el estado, registrando en lo que va de 2024 más de 100 casos, entre ellos al menos 11 menores de edad, porque según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y de la Secretaría de Salud estatal supera los 200 casos anuales en los últimos cinco años.
En el marco del Día Mundial de la Prevención del Suicidio se consultaron estadísticas del 2023, las cuales revelaron que Yucatán registró 203 suicidios y hasta agosto de 2024 se han documentado más de 100 casos.
Aunque la incidencia es algo mayor en las zonas urbanas en comparación con las rurales, Mérida y sus alrededores destacan como las áreas con mayor número de incidentes.
La salud mental en Yucatán enfrenta una paradoja significativa, pues a pesar de ser uno de los estados más seguros del país en términos de violencia, la entidad lidera estadísticas nacionales de suicidios, con una tasa alarmante de 26.9 suicidios por cada 100 mil habitantes.
En respuesta, el Gobierno de Yucatán ha implementado varias iniciativas, como una línea de apoyo emocional disponible las 24 horas, tamizajes poblacionales a través de aplicaciones de inteligencia artificial y programas de primeros auxilios psicológicos.
Además, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y la Fiscalía General del Estado han unido fuerzas para ofrecer apoyo psicológico y social a las personas en riesgo.