EE.UU. media negociaciones entre Ucrania y Rusia para un posible cese al fuego temporal
Las discusiones, facilitadas por representantes de la administración norteamericana, excluyen por el momento las demandas estratégicas clave de ambos bandos y se centran en acuerdos básicos para reducir la escalada del conflicto.
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El posible acuerdo contemplaría una tregua de 30 días, enfocada en la protección de infraestructura civil como escuelas, mercados y centrales energéticas, así como en establecer reglas para el comercio en zonas de interés común. Además, se buscaría implementar mecanismos de verificación para supervisar el cumplimiento del cese hostilidades en el frente.
Enfoque gradual y desafíos
Mike Waltz, asesor de Seguridad Nacional, señaló que las negociaciones avanzan bajo un esquema “de lo particular a lo general“.
“Primero se abordaría un alto al fuego en el Mar Negro para permitir el flujo comercial, luego la estabilización de las líneas de control y, finalmente, discusiones sobre un acuerdo duradero”, explicó.
Sin embargo, las posturas de Kiev y Moscú siguen distantes en aspectos fundamentales: la membresía de Ucrania en la OTAN, el estatus de los territorios ocupados por Rusia, el apoyo militar occidental a Ucrania y la posible intervención de fuerzas de paz internacionales.
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Declaraciones cautelosas
El ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umerov, afirmó que su país trabaja en “fortalecer la seguridad” pero reconoció la complejidad del proceso. Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, calificó las pláticas como “un primer paso” y advirtió que persisten “desafíos significativos”.
Aunque el gobierno estadounidense espera anunciar la tregua antes de finales de abril, analistas consideran improbable un acuerdo definitivo en el corto plazo, dada la profundidad de las diferencias. La administración norteamericana, no obstante, insiste en que este diálogo sienta las bases para futuras negociaciones.
