
Especialistas advierten que el endurecimiento de políticas migratorias podría afectar desde la logística del evento hasta la seguridad y experiencia de los aficionados.
La migración como posible obstáculo para la Copa del Mundo
De mantenerse la línea migratoria impulsada por Donald Trump, el Mundial 2026 podría enfrentar serias complicaciones logísticas y sociales. La mayor preocupación recae en el hostigamiento hacia turistas de origen latino y en la reducción de mano de obra en sectores clave como hotelería, restaurantes y servicios, altamente dependientes de trabajadores migrantes.

El perfil del aficionado bajo la lupa migratoria
El doctor Milton Muñoz Bravo, especialista en relaciones internacionales, advirtió que si el clima de odio y miedo hacia los migrantes continúa, podría derivar en detenciones arbitrarias o un ambiente hostil para visitantes de perfil no anglosajón, en particular latinos, personas morenas o provenientes de países con conflictos políticos con Estados Unidos.
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Un Mundial sin trabajadores: el riesgo detrás del endurecimiento
La falta de personal en servicios no es una suposición, ya es una realidad. Zonas agrícolas como Avondale, Pensilvania, donde laboran miles de migrantes latinos, ya han resentido el impacto de las políticas migratorias con arrestos masivos. Esta situación podría replicarse en sectores que deben operar al máximo durante un Mundial.
¿Un Mundial segmentado por geopolítica?
El experto señaló que, en el caso de países con relaciones tensas con EU, como Irán, podrían jugar en México o Canadá para evitar conflictos. Esta posible segmentación revela cómo la política migratoria y la tensión internacional podrían influir directamente en la organización del torneo más grande del planeta.

La comunidad latina: pieza clave y vulnerable
Más de 4 millones de trabajadores latinos forman parte de la industria de la hospitalidad en Estados Unidos, según cifras oficiales. Si continúan las deportaciones y arrestos de indocumentados, el Mundial no solo corre el riesgo de fallas operativas, sino también de empañar la experiencia de millones de aficionados.