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Recorre más de 50 kilómetros al día para sobrevivir

Con la llegada de la temporada de calor, es común ponerse de buen humor al escuchar el sonido de una cornetilla que nos anuncia una refrescante solución, se trata del tepache, una bebida natural de delicioso sabor; sin embargo, no dimensionamos lo que cuesta que llegue a nuestra boca, y es que los encargados de proveerlo realizan duras travesías durante todo el día y además bajo el rato del sol.

Ese es el caso Ángel H., un joven de 20 años de edad, originario de Chiapas, quien desde hace casi diez años se gana la vida a bordo de un triciclo vendiendo esta tradicional bebida mexicana; para lograrlo pedalea cada día alrededor de 50 kilómetros por las calles de la ciudad.

El joven originario de Chamula, un pueblo cercano a San Cristóbal de las Casas, sale desde el poniente de Mérida y llega hasta el municipio de Kanasín, luego bordea las colonias del sur y regresa a hasta la zona de Chenkú para ganarse, en un día bueno, 600 pesos, o 200 si la demanda de la bebida fue poca.

Irónicamente, los días de intenso sol son los más productivos para el joven vendedor, pero también los más difíciles para realizar esta actividad. “Si gusta mi trabajo, más cuando está nublado, pero es cuando casi nadie compra”, comentó.

Por su origen humilde, no tuvo una formación académica formal y la idea de estudiar se ha alejado de su cabeza porque no tiene tiempo, puesto que invierte en su trabajo más de diez horas, de 8 de la mañana a 5 o 6 de la tarde, todos los días.

Acostumbrado a trasportar un barril de madera de 60 litros, junto con contendores desechables y algunas botanas que también oferta, Ángel, considera que su trabajo es bueno y de cierta manera le gusta porque le permite satisfacer sus necesidades básicas.

Ángel llegó a Mérida en 2014 y desde el principio comenzó a colaborar con una agrupación con sede en el barrio de Chenkú, donde la flotilla de más de 40 repartidores, lleva el tepache a las distintas zonas de la capital yucateca.

El Tepache básicamente se prepara usando las cáscaras de la piña y otros ingredientes para endulzarlo, pero para obtener su sabor inconfundible, requiere la piel de la fruta sea fermentada, un proceso que puede extenderse hasta 15 días.

El Tepache es como una cerveza ligera y es la bebida perfecta, sobre todo, durante los días de intenso calor, así que la próxima vez que le compres una bolsa de 20 pesos o un vaso de litro, disfrutarás más su sabor.

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