Por: Darcet Salazar
Como un paso decisivo para la atracción de inversiones, la generación de empleo y el fortalecimiento de la competitividad regional resulta la creación de los Polos Industriales del Bienestar en Progreso y Mérida, zonas estratégicas que buscan elevar la capacidad productiva, ofrecer incentivos fiscales y administración a las empresas y asegurar un crecimiento sostenido en el estado.
El titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Rogelio Ramírez de la O señaló que, el decreto que formaliza estos polos, publicado el 28 de junio de 2024 en el Diario Oficial de la Federación, incluye atractivas reducciones fiscales, como hasta un 90 por ciento en el impuesto sobre la renta para aquellas empresas que superen las expectativas de generación de empleos.
Con estos estímulos, esperan que Progreso y Mérida se consoliden como motores clave del desarrollo económico local, mejorando los salarios y la estabilidad laboral para los trabajadores de la región.
Indicó que los Polos Industriales del Bienestar buscan posicionar al estado en el mapa de la industria nacional e internacional. En Progreso, la ubicación estratégica es fundamental, ya que se facilita el acceso a mercados internacionales, reduciendo costos de logística para las empresas exportadoras. Mérida, por su parte, destaca por su infraestructura tecnológica y su potencial para la innovación, ofreciendo un entorno propicio para empresas tecnológicas y de servicios avanzados.
Uno de los principales objetivos de las iniciativas es la diversificación económica del estado, con especial énfasis en sectores como el de energías renovables, tecnologías de la información y manufactura avanzada.
De este modo, se espera que Yucatán no sólo dependa de las industrias tradicionales, sino que también amplíe su portafolio productivo hacia sectores con alto valor agregado, lo que a su vez atraerá a inversionistas internacionales.
Con este plan, se pretende mejorar las habilidades técnicas de la fuerza laboral, preparándola para los nuevos retos que implican estas inversiones.
Se estima que en los próximos tres años se generen alrededor de 15 mil empleos directos y más de 25 mil indirectos, impactando positivamente en la economía local.
En cuanto a la sustentabilidades incorporarán prácticas amigables con el medio ambiente, promoviendo la instalación de empresas que implementen tecnologías limpias y eficientes en el uso de recursos.
Esperan que el crecimiento económico no comprometa el entorno natural, un aspecto clave para mantener el equilibrio en una región rica en biodiversidad.
Con estas medidas, la entidad se perfila como un modelo de desarrollo económico integral, que combina crecimiento, innovación y responsabilidad social.
Los Polos Industriales del Bienestar no sólo representan una oportunidad para la inversión, sino que también refuerzan el compromiso del estado con el progreso sostenible, beneficiando tanto a las empresas como a la comunidad local.
La SHCP se encargará de verificar el cumplimiento de los lineamientos y de emitir las constancias que acrediten a las empresas beneficiarias, entre los que se pide, estar al corriente de sus obligaciones fiscales, contar con la concesión o el arrendamiento de las áreas dentro de los polos, presentar un proyecto de inversión aprobado por las autoridades competentes, y tener su domicilio fiscal en la región.
